Dirán ustedes: ¿Un disco clásico que apenas tiene 6 años de vida? Pues en mi opinión es clásico por obligación, y es que desde el primer momento en el que los Arctic Monkeys comenzaron a escucharse por internet (en aquellos tiempos era un fenómeno poco usual) era inevitable decir que el acontecimiento era ya clásico, mientras bandas como los Beatles se habían tenido que promocionar tocando diariamente en un club nocturno en Alemania y haciendo una gira por Estados Unidos, lo único que hicieron Alex Turner y compañía fue subir un demo a su MySpace y con eso bastó para hacer barullo y comenzar a ser considerados como iconos de una generación.
Esta banda fue formada en los suburbios de la ciudad de Shieffeld, Inglaterra, cuya forma de cantar del vocalista hace honor a su lugar de origen, un inglés un tanto 'sucio' y un acento característico del norte de Inglaterra, este genio es Alex Turner, quien, junto con Jamie Cook formaría esta asombrosa banda a principios de esta década. Pero no sería hasta el 2003 cuando empezarían a tener fama gracias al fenómeno antes mencionado. Este, su álbum debut es lanzado hasta el 2006, el cual lograría tener el suficiente impacto musical para ser considerados una de las bandas más innovadoras de la década. Influenciados por bandas de la Invasión Británica, Britpop o el Rock Alternativo, su sonido se basa en la sincronía de las dos guitarras y la voz de Alex.
El disco empieza con el estrepitoso sonido de "The View From The Afternoon" y esa capacidad de sonar Punk por lo veloz pero sin nunca perder el ritmo, podríamos decir que es un tema que genera algo de incertidumbre, "I Bet You Look Good On The Dancefloor" llega con toda la intensidad de una tabla de surf chocando contra una ola, riffs y melodías apantallantes que describen muy bien el estilo de la banda, nunca se desborda (aunque pareciera hacerlo) y tiene la velocidad adecuada, para calmar las aguas un poco tenemos “Fakes Tales of San Francisco” que es más tranquila al principio y simplemente se caracteriza por sus riffs pegajosos que no pueden dejar de ser tarareados por nuestros labios mientras escuchas el tema.
"Dancing Shoes" es Rock N Rollera en todo momento y es donde el bajo resalta sobre los demás instrumentos aunque también existe un solo de guitarra que muestra que esta no se quiere dejar atrás, al escuchar ''You Probably Couldn’t See for the Lights But You Were Staring Straight at Me'' te das cuenta que te tardas más en pronunciar su título y tratar de entenderlo que lo que dura la canción, no deja de ser un buen tema, ahora vamos con "Still Take You Home" que es prácticamente imposible de cantar (inclusive el coro es bastante difícil) sin embargo no por eso te dan ganas de hacer un mini slam alrededor de tu cuarto mientras la escuchas, viene el momento melancólico del álbum “Riot Van” y no pareciera encajar mucho pero con ponerle mayor atención basta para pasar un agradable rato.
Llega ''Red Light Indicated Doors Are Secured'' con un riff repetitivo y un bajo muy alegre que lo secunda, el tema nunca explota del todo y eso es lo que lo hace mágico de cierto modo, llega otro momento para andar de melancólico con "Mardy Bum" que es un tema muy pop pero tiene sus pequeños brincos al Rock y logra su acometido de ponernos a pensar un poco, ''Perhaps Vampires Is A Bit Strong But...'' llega como el tema más metálico y pesado del álbum, lo mejor viene al final ya que se hace una especie de jam místico que va creciendo en cuanto a intensidad y se esconde por un momento pero implota dentro de sí mismo para finalizar.
“When The Sun Goes Down” es un tema que ya se volvió clásico por obligación, con su intro acústica y cantable cuya calma se rompe por la llegada de un riff repetitivo y bailable, intensidad que se mantiene a lo largo de la canción que cierra de la misma manera que comenzó, “From The Ritz To The Rubble” nos habla sobre la vida nocturna de los barrios bajos de Inglaterra y termina de una manera épica: con coros y un bajo risonante, pero ha llegado el momento de decir adiós y para eso está “A Certain Romance” con todo y su eclectisismo musical y la suave melodía que se va llevando el viento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario